SOGARPO, la Sociedad de Garantía Recíproca que opera fundamentalmente en las provincias de Pontevedra y Ourense, facilitó financiación a pymes, autónomos y emprendedores por importe de 22,3 millones de euros en 2015, con un crecimiento del 42% frente a la cifra de avales formalizados en el ejercicio anterior.
Estas operaciones se canalizaron a través de 749 avales. En el ejercicio anterior, se habían formalizado, por parte de esta sociedad de garantía, un total de 569 avales por importe total de 15,7 millones.
El número de socios partícipes (pequeñas y medianas empresas que acceden a financiación a través del aval de la SGR, a 31 de diciembre de 2015 ascendió a 6.843; mientras el número de socios protectores (Xunta de Galicia, IGAPE, Diputaciones provinciales, entidades financieras, Confederaciones y Asociaciones de empresarios…) se situó en 28.
Mejores precios, mayor plazo de amortización
Respecto a plazos de devolución, la mayoría, seis de cada diez pymes que acuden a una SGR como SOGARPO, afrontan la amortización de sus préstamos o créditos en un plazo superior a los ocho años. Y en el 92% de los casos, el periodo de devolución establecido se sitúa por encima de los tres años.
Precisamente la longitud de los plazos es una de las ventajas competitivas que aportan las sociedades de garantía recíproca frente a los canales tradicionales, algo que incide en que las cuotas mensuales sean más asumibles por las empresas.
Un sector histórico para el empleo
Pendientes de disponer de estos datos a 31 de diciembre de 2015, al cierre de 2014, el conjunto de Sociedades de Garantía acumulaba una cifra histórica de avales formalizados por más de 27.500 millones de euros, a partir de más de 700.000 operaciones. Con estos fondos, la acción de las SGR ha propiciado una inversión inducida de 35.759 millones de euros.
Su contribución al empleo, a partir del riesgo vivo en vigor a finales de 2014, se situaba en casi 650.000 puestos de trabajo, repartidos entre 36.000 compañías.
Por otra parte, cabe destacar que el sector ha concedido históricamente más del 80% de las solicitudes presentadas, lo que demuestra la fiabilidad de las SGR y el alto compromiso de las empresas beneficiarias a la hora de devolver los importes recibidos.